Para el ser humano recibir afecto es una necesidad básica, como lo puede ser descansar o alimentarse. Nos aportan seguridad, confianza, genera placer, mejora nuestra autoestima, disminuye los niveles de estrés, pudiendo llegar incluso a reducir la presión arterial.
El doctor Paul Zak afirma que los abrazos de ocho segundos alivian el dolor y nos reconfortan, puesto que bajan los niveles de cortisol, generando a su vez mayores niveles de oxitocina, haciendo posible que experimentemos sensaciones sumamente agradables.
Si quieres comprobarlo, ¡Abraza mucho!
¡Busca tu felicidad!
No lo dudes, tu salud mental es lo más importante. Estaremos encantados de atenderte, tus necesidades son lo más importante
Carmen Campos Urbanos - Doctoralia.es